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LUIS CASTILLO: QUE PASÓ, QUE PASA, QUE VENDRÁ
El presidente de la CONAICE, Luis Castillo, fue invitado a Pueblo Cooperativo y Mutual en Tecnópolis por el INAES. Estuvo acompañado por el vicepresidente de la Fecescor, Víctor Gianandrea; por Diego Yanez, presidente de la Cooperativa Eléctrica de Las Varillas y subsecretario de FECESCOR y Bruno Rodríguez de FEPAMCO.
Luis Castillo es un referente importante, en el ámbito de las Cooperativas de Servicios Públicos. Es presidente de la Confederación Argentina Interfederativa de Cooperativas de Electricidad y Otros Servicios Públicos -CONAICE-. También es presidente de la Federación de Cooperativas Eléctricas y de Obras y Servicios Públicos de la Provincia de Córdoba -FECESCOR- y de la Cooperativa Eléctrica de Obras y Servicios Públicos -CESOPOL- de la ciudad de Oncativo, provincia de Córdoba.
Luis Castillo- presidente de la CONAICE
“Las Cooperativas de Servicios Públicos han hecho un largo recorrido histórico en este país, hay cooperativas que van a cumplir 100 años; las primeras cooperativas y las más numerosas son las que nacieron con el servicio eléctrico; luego se desarrollaron como subsidiarias del Estado las Cooperativas Telefónicas; pero las que tienen una relación directa que se puede decir que es “cuasi” socia con el Estado, son las Cooperativas de Servicios Públicos.
El Estado delega en estas cooperativas la responsabilidad de llegar al interior del interior, que es donde nos desarrollamos, confiando en esta asociación de usuarios que se transformaron en cooperativas para poderse brindar los servicios que ni el Estado ni el gran capital privado iban a prestar, porque eran localidades pequeñas.
Cuando no está en las manos adecuadas, sino en empresas con fines de lucro, el dinero que pone nuestra gente directamente o a través de los impuestos, se convierte en los excedentes financieros que hoy descansan en los paraísos fiscales y en los Bancos Internacionales y nosotros tenemos que mendigar a la Banca Internacional que nos haga préstamos a intereses usurarios para poder hacer inversiones y para atender nuestras necesidades”.
Un sentido cooperativista para los nuevos tiempos
“Estos tiempos y lo que viene en el futuro van a tener un sentido más cooperativista de lo que nosotros creemos, ya que la integración cooperativa podría hacer realidad muchísimas iniciativas y el beneficiario directo, es siempre el asociado, que dio origen a la cooperativa, para prestarse servicios al menor costo y a la mejor calidad.
Cuando entendamos eso, quizás encontremos que las cooperativas son una herramienta muy importante y que están ocupando un espacio territorial enorme casi en el 60% o tal vez el 70% del territorio del país. En la provincia de Córdoba hay 204 cooperativas eléctricas que ocupan el 70% por ciento de provincia y en la provincia de Buenos Aires es lo mismo.
Tal vez podamos encontrar una forma de armar esa matriz, esa integración, que nos permita entender que esta herramienta es la solución para muchos de los males que tiene la Argentina, fundamentalmente de inversión.
Las Cooperativas de Servicios Públicos demostraron que no tenemos que pedir recursos a nadie, simplemente tenemos que lograr la confianza de nuestra gente que es la que siempre puso el dinero para que nosotros les brindemos soluciones de servicio, no solamente públicos, sino de todo lo que haga falta”.
Que pasó con los “pueblos “chicos”
“Al cabo de 100 años de trayectoria se han transformado en cooperativas importantes. Yo provengo de una cooperativa que cuando se fundó -va a cumplir el año que viene 70 años-la localidad de Oncativo tenía 2.000 habitantes y hoy tiene más de 16 mil.
Al principio esa necesidad del servicio eléctrico, se cubría unos días unas horas de un lado del pueblo; otros días del otro lado del mismo, ya que generalmente los pueblos en el interior se dividen o por el ferrocarril o por la ruta y a través de estos años logramos prestar con eficiencia y con calidad y con un sentido de universalidad, los servicios a toda la población”.
Un servicio socializado en igualdad
“Hemos avanzado en que las cooperativas eléctricas son el andamiaje para prestar el servicio de telefonía; de internet; de televisión; de salud; de educación; de vivienda, estamos en todos lados y cada servicio ha sido producto de una necesidad de la población.
Las cooperativas han logrado socializar de alguna manera la necesidad de la gente, en igualdad, más allá de su condición socioeconómica.
Hay gente que cree que las Cooperativas de Servicios Públicos tienen que regalar su servicio y en realidad, no deben regalar nada, no es su función. Su función es prestar servicios con eficiencia y dentro del marco solidario, como lo dice la Ley y el Estatuto: un socio un voto, con la misma obligación y los mismos derechos y así funciona perfectamente y soluciona los problemas a la gente.
Es así que, si tenemos un Servicio de Sepelio será en iguales condiciones de dignidad y de costo para el que tiene mucho dinero o quién no y del mismo modo brindamos un servicio para el hogar; para la tercera edad; de educación o de ambulancia”.
El secreto de CESOPOL para construir viviendas
“En Oncativo, la Cooperativa ha entregado en siete años, ciento ochenta viviendas sociales de alta calidad y tiene 80 más en proceso para entregar, a una cuota que es casi de un alquiler; sin intereses sin subsidiar nada; sin regalarle nada a nadie; sin financiar desde la cooperativa; sin cometer el error de creer que hay que ser generoso con la plata ajena y sin tocar los recursos de los servicios.
Lo hemos hecho a través de un sistema de fideicomiso, sin fines de lucro, sin cobrar absolutamente nada, porque yo soy el fiduciario que no cobró un peso para administrar ese dinero, respondiendo a todas las comisiones de control como corresponde; en el marco de la Ley y con el mismo dinero que se pone todos los meses los adjudicatarios construyen sus casas al costo de un alquiler.
Nos hemos cansado de recorrer oficinas para mostrar nuestro proyecto; invitarlos que vayan y lo vean; que es algo tangible; posible; probado; a través del cual se puede acceder a una vivienda al 50 ó 60% del costo del mercado; acceder a la tierra que es lo más difícil y pagarlo con una cuota sostenible.
El Estado tiene otro rol, que es ocuparse de los sectores extremadamente vulnerables que no tienen acceso a otra posibilidad y a lo mejor están agobiados por un alquiler y aquí es donde deben hacerse ver las políticas públicas. Por otra parte, la Banca tiene que dar apoyo financiero al que quiere hacerse una vivienda y tiene el dinero para pagarla.
Pero el que quiere una vivienda accesible, de calidad y necesita pagarla con dignidad, tiene que ampararse en el Sistema Cooperativo y no hay otra”.
Saludamos al tren desde el andén
“La gran oportunidad que tuvimos y que perdimos, porque el Estado no nos ha tenido en cuenta en sus políticas -indudablemente no eran nuestras cooperativas las más tenidas en cuenta-, fue en los años 90 en que se hizo la Reforma del Estado y los Servicios Públicos pasaron a ser, algunos, de un grupo de trabajadores que se transformaban en cooperativas, con las características que tienen asociada a toda su población y otros, la gran mayoría, quedaron en otras manos privadas.
A través de casi 30 años, se desprendieron del Estado empresas importantes; estratégicas desde la Justicia Social y de la universalidad que tienen que tener los servicios y yo creo que era el momento para que las cooperativas asumieran una responsabilidad de aquellas cosas que el Estado no podía o no quería asumir, por la razón que fuera.
Aquí tendría que haber sido el Sector Cooperativo el que se hiciese cargo de esos servicios y hubo una segunda oportunidad, que destacamos en varios Congresos cuando se estaba por aprobar la Ley de Medios, que había una política que nos la daba. Pero las cooperativas nos pusimos en el andén y fuimos a saludar con el pañuelito”.
La telefonía móvil
“Hay sectores cooperativos que están trabajando con la telefonía móvil, como COLSECOR o la Cámara de Cooperativas de Comunicaciones-CATEL. Deberíamos tener una gran conciencia de unidad en este caso, respetando la historia y el lugar que cada uno ocupa y de esa manera también fidelizar al dueño de esa cooperativa que es cada uno de los socios, para que se transforme no solamente en el usuario del servicio, sino en el dueño como usuario de ese servicio.
Entonces, tendríamos capacidad de mercado; capacidad de inversión; todo lo que se hace en materia de servicio se hace con el dinero de la gente ya sea a través de la cooperativa o de los impuestos; que es la beneficiaria de esos servicios y que a veces no son de tanta buena calidad, según qué empresa los provea”.
Colofón
Trabajar por la integración
“Hay un problema que no hemos podido todavía encontrarle la solución -a pesar de los avances y logros conseguidos- qué es una autocrítica que se tiene que hacer la propia dirigencia en su conjunto, en realidad toda la familia cooperativa, que es trabajar fuertemente por la integración.
El cooperativismo está muy atomizado y las acciones desintegradas son muy débiles y no hay interlocutores válidos a la hora de sentarse con el Estado a discutir la Política de Estado y lograr los objetivos solidarios”.