Los titulares de la Mesa de Enlace del Campo, tuvieron una reunión virtual con el canciller Felipe Solá y Jorge Neme secretario de Relaciones Económicas de la Cancillería, ya que estaban preocupados por los cortocircuitos con Brasil y por el anuncio del gobierno argentino de que no participaría en futuras negociaciones del bloque con otros países y regiones.
En la teleconferencia participaron Jorge Chemes-Confederaciones Rurales Argentinas-, Dr. Carlos Iannizzotto-Confederación Intercooperativa Agropecuaria- CONINAGRO, Carlos Achetoni-Federación Agraria Argentina- y Daniel Pelegrina -Sociedad Rural Argentina-. Además del canciller Felipe Solá y Jorge Neme, de la Cancilleríase sumaron el jefe de Gabinete, Guillermo Chaves y la subsecretaria María del Carmen Squeff.
Felipe Solá ministro de Relaciones Exteriores,
Comercio Internacional y Culto de la Nación
“No hubo ni hay ruptura en el Mercosur, pero nos preocupan los eternos acuerdos sanitarios que nunca se concretan, y por eso les planteamos a los socios del Mercosur que en los acuerdos hay que discutir el acceso de nuestros productos.
Es conveniente profundizar el proceso de integración regional y los avances en acuerdos comerciales de envergadura, que le aseguren a nuestra producción un mejor acceso a mercados.
Ganar mercados es algo que se consigue producto por producto y país por país y se necesita un Mercosur fuerte porque en un mundo cada vez más regionalizado o somos parte de una región o no somos”.
Jorge Neme secretario de Relaciones Económicas de la Cancillería
“El Mercosur necesita una reingeniería, pero no debemos olvidar que es para conectarse con el mundo, para beneficiarnos con las inversiones, la tecnología y el comercio y no para encarar una apertura ingenua o indiscriminada.
Hay que defender el potencial de las Economías Regionales, por ejemplo, se puede producir fruta en toda la Argentina, desde Jujuy a Santa Cruz”
Argumentos ruralistas
A la par de la inquietud por el Mercosur, la Mesa de Enlace planteó la necesidad de avanzar en la consolidación del liderazgo de Argentina en la exportación de los productos de origen agroindustrial y las producciones regionales, como así también de bienes vinculados con la innovación tecnológica, como la biotecnología y maquinaria agrícola.
Los ruralistas destacaron que el 65% de las exportaciones argentinas son productos agroindustriales -proteínas vegetales y animales, fibras y biocombustibles-.
En la enorme mayoría de estos casos, los niveles de la oferta productiva de Argentina superan ampliamente la capacidad de absorción de esta oferta por parte del mercado local, por lo que el aprovechamiento de las oportunidades comerciales que surgen de la mano de la exportación es vital para lograr el ingreso de divisas genuinas, la creación de empleo de calidad y el desarrollo de las economías de las regiones en todo el territorio nacional.
Asimismo, trataron temas inherentes al trabajo de organismos técnicos como el SENASA y el INTA, en lo que respecta a temas de cooperación, así como la relación de nuestro país con organismos internacionales de referencia para nuestras actividades como son la OMC, la FAO, la COP, la OIT y la OCDE, entre otros.
Se añadió que la capacidad de motorización y reactivación económica del campo será vital para afrontar los desafíos de la economía y el comercio en el período post-pandemia, para lo cual se requiere profundizar la integración con los países del Cono Sur, adaptar las estructuras productivas a los nuevos requerimientos y protocolos de los mercados y consumidores y también fortalecer a los organismos técnicos de cooperación entre los países y asegurar políticas de promoción del comercio.
Sostuvieron también que la demanda externa exige apuntar a la investigación y al desarrollo de mercados, a la trazabilidad e identificación, a la certificación, la fidelización de marcas, al posicionamiento de los productos, a la sensibilidad y amistad con el medio ambiente, donde los productores argentinos estamos a la vanguardia del desarrollo tecnológico, con sistemas productivos sustentables basados en las Buenas Prácticas Agropecuarias, tanto agrícolas como ganaderas.
Finalmente, los dirigentes del campo se pusieron a disposición del canciller para profundizar el diálogo público-privado, con el objetivo de establecer e impulsar una política de comercio exterior en beneficio de nuestro país.
Colofón
El espíritu y los ideales que promovían los presidentes Alfonsín y Sarney en 1985 que sentaron las bases del Mercosur era superar la visión conflictiva y competitiva que se tenían mutuamente los dos países más importantes del bloque, por una perspectiva de cooperación e integración.
Hoy el Mercosur está debilitado por la falta de diálogo entre Brasil y Argentina, sus presidentes nunca hablaron, ni siquiera en forma virtual.
El anuncio de Argentina de abandonar las negociaciones comerciales en curso con Canadá, Líbano, Corea del Sur y Singapur, estremecieron a los países integrantes. Esto, echaría por tierra las iniciativas para una mayor apertura comercial del Mercosur que estarían previstas con India, Japón, Vietnam e Indonesia.También se está negociando con la Unión Europea y el EFTA -Islandia, Liechtenstein, Noruega y Suiza-.
Esperemos que la reorganización del Mercosur con nuestros países latinoamericanos unidos, den sentido al ideario de “patria grande” que proclamaban nuestros próceres.