Nadie está preparado para perder a un amigo.
Todos piensan que van a seguir juntos caminando por la vida como hasta ahora.
Pero si se trata de Alberto Oscar Muñoz, presidente de la Mutual de Empleados de Comercio de Nogoyá, un dirigente tan querido, tan amigo de los amigos, con esa vocación de servicio, esa sonrisa, esos ideales en común, el dolor solo tiene preguntas para hacer.
En 2005 ya era Vicepresidente de la Mutual de los Empleados de Comercio de Nogoyá -AMEC-, fueron cuatro años de ponerse la camiseta y estar en todo.
En 2008 se desempeñaba como Secretario General del Centro de Empleados de Comercio.
En 2009 lo eligieron sus pares presidente de AMEC- puesto que ocupaba actualmente- y Encargado de la Obra Social de OSECAC.
Lo recordamos como un luchador que nunca bajó los brazos, aún en las situaciones más difíciles, remontó todas las tormentas porque quería estar cerca de la gente para apoyarla, para remediar lo que se podía remediar.
Años de trabajo en estas organizaciones sociales hasta llegar a ser el querido dirigente al que hoy despedimos.
No estamos preparado para perderlo, por eso las palabras no alcanzan.
Porque no hubo tiempo de decir adiós.
Se llamaba Alberto Oscar Muñoz.
Se lo recordará por su simpatía, por el saludo fraterno de la mañana.
Por su manera particular de ayudar, aunque no le pidieran ayuda.
Por formar parte, por pertenecer, por la actitud solidaria y dispuesta a dar siempre una mano.
Sabemos que cuando alguien se va, sigue “siendo” en todos nosotros.
Se seguirá su ejemplo, se continuará su obra.
También sabemos que se lleva algo nuestro.
Nunca lo olvidaremos.