Despedimos a un dirigente muy querido y respetado dentro del cooperativismo al que, seguramente muchos conocerán se llamaba Daniel Orlando Kindebaluc y falleció a los 60 años.

En estos momentos era vocal de la Cooperativa de Servicios Públicos General San Martín de Seguí, en la que comenzó a forjar su trayectoria en el cooperativismo y a la que nunca abandonó, a pesar de haber llegado a los cargos más altos dentro del cooperativismo organizado.

Fue electo para la presidencia de la Federación Entrerriana de Cooperativas -FEDECO- y en forma paralela, ejerció como Secretario General de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria -CONINAGRO- y también formaba parte de su Comité Ejecutivo. 

Lo hemos conocido lo suficiente para saber que tenía un trato educado y amable, que era cálido y accesible y que aceptaba otros puntos de vista. Que estuviera dispuesto al diálogo era invalorable en las reuniones donde nos cruzamos en varias ocasiones.

En la Asamblea de FEDECO el 19 de diciembre del 2020, supo valorar como si fuera una premonición lo siguiente: “…pero lo importante es que la mayoría de las cooperativas andan bien y sus integrantes pudieron sortear los problemas de salud, estamos vivos y caminando, que eso no es poco” y es claro que tenía razón ¡no era poco!

Amaba al cooperativismo y se notaba su pertenencia a este sistema y también lamentaba que “el Gobierno provincial no privilegie la relación con el Sector”.

No importaba que se hiciera nota, porque naturalmente tenía presencia y aunque no hablara mucho o su voz no sobresaliera del resto, imprimía serenidad en las reuniones, y todos sabíamos lo que pensaba, como actuaba, porque su conducta era transparente y honesta.

Lo despedimos sabiendo lo temprano que es para hacerlo, que no lo esperábamos y que nos resulta totalmente inexplicable.

Seguirá “siendo” entre nosotros, porque los hacedores no se van, están en cada detalle de la obra que forjaron. No lo olvidaremos.